lunes, 22 de octubre de 2012

Mujer de Arena...

Solo para ti es la hora de mi reloj, que se detuvo en el mágico tiempo de una brisa Primaveral, me colgué a mirar cada vuelta de sus manecillas y me perdí en la inmensa ruta que lleva a tu recuerdo, apague mi tiempo y calme los ecos de cada latir de mi corazón, para que no se confunda mi pensamiento, con tu voz. Con las ganas de viajar por el espacio Rumbo a esos Mares que te Rodean, romper los límites de la distancia para abrazarte, hurgar como un mendigo cada rincón de tu interior, y patentar para siempre la única forma que existe para llegar a tu corazón,. Me cruce una gaviota de esas peregrinas, que suelen ir de la roca del mar hasta la cima de los cielos para contemplar el agua, y pregunte por ti amiga… cual si fuera el Ada que a de cuidarte. Contare los días, las horas y cada segundo… del reloj que gira en sentido contrario, para encontrarte justo en aquel día, que conocí tu rostro, pintado de alegría con ansias de caricias, con gemidos que dentro de tu alma se morían por decir las palabras que liberen tu rebeldía. Yo se que tu corazón frágil se despierta cada mañana, y se pinta los labios, se acomoda las uñas y peina su bello cabello, y se va por el día pensando en el lápiz de estos versos, que se va colando lentamente… en tu imaginación, inevitable como el respirar, tan ansiosa como el día que descubriste, que todo lo que pienso es para ti… nada mas… y que cada día que pasa, es uno menos para poderte hallar…




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